Rebelde a capa y espada, libre y fiel a sí mismo, Robe Iniesta nos deja por "la vereda de la puerta de atrás". Lo hace un día después de la partida de Jorge Martínez, ese "joven y arrogante", ese macarra sensible que violentó el rock español con Ilegales. Ambos se fueron después de que Joaquín Sabina anunciase su retirada de los escenarios al "número 7 de la Calle Melancolía".
Con ellos nos despedimos de una generación que marcó el fin del franquismo y el nacimiento de la música moderna. Poetas y filósofos que no son flor de un día, sino que tuvieron, y siempre tendrán, mucho que decir. |